Comprar un notebook comenzó por ser un lujo que no todos podía darse, y es que no era realista el pensar que cualquiera podía tener un ordenador portátil si el precio que había que pagar era abiertamente superior al que exigía un PC convencional. Con el paso de los años las pantallas frágiles y monocromáticas en los portátiles desapareció, llegó la masificación de la tecnología y aparecieron los netbooks, pequeños portátiles que fueron la solución más práctica para la gran mayoría de consumidores que buscaba navegar y ver mails.
Hay que entender que en su momento tener un PC lo fue todo, luego se llegó a la moda de los portátiles y más tarde fueron los netbooks los que regocijaron a quienes navegan en Internet y necesitan una forma sencilla de mantenerse comunicados por email, sin embargo, entre el uso de smartphones cada vez más competentes, aparecieron los tablets o tabletas, las cuales combinaron a la perfección la autonomía de un notebook, la versatilidad de un netbook y las ventajas de un smartphone, y ello en términos económicos se hizo palpable durante los primeros meses del año pasado y el primer trimestre del presente 2011.
La venta de netbooks cayó un 40% y eso nadie lo puede negar, ya que las razones que motivan al desencanto de los consumidores son tan variadas como diferentes son las ofertas a las que se enfrentan los mismos a la hora de escoger qué solución portátil comprar. Lo más extraordinario es que los PC han caído sólo un 8% en las ventas.
Es de esperarse que el re-encantamiento de los consumidores llegue este año para con los netbooks cuando Acer y ASUS consigan comercializar sus proyectos por $199, los que usando MeeGo y el OS de Google tratará de darle más versatilidad las opacadas soluciones portátiles que en su momento causaron sensación.
Hay que reconocer que en la actualidad las tablets aparecen como la compra ideal para quienes buscan autonomía, tecnología y larga duración de batería, pues todos saben que la prescindencia de un teclado es beneficiosa cuando se cuenta con un dispositivo de tecnología “touch”, aunque puede costar más caro en la gran mayoría de los casos. La inclusión de procesadores de doble núcleo y tecnología gráfica integrada con posibilidades HD también es otro de los incentivos que mataron la pasión por los netbooks, por lo que el futuro para estos portátiles diminutos cambiará sólo si la oferta de tabletas no baja aún más de precio.