Netflix, recordemos, es el servicio online que permite ver series y películas de manera ilimitada y legal, por un abono que el usuario paga mensualmente. Con un catálogo de 100.000 productos, y más de 20 millones de usuarios entre Estados Unidos y Canadá, es quien lidera actualmente el mercado de video online.
En julio, el gigante del streaming anunciaba que antes de fin de año estaría llegando a Latinoamérica, y a partir de hoy los usuarios de Brasil ya pueden disfrutar del servicio de Netflix por 14,99 reales al mes, donde los suscriptores tienen la posibilidad, según explicaba Reed Hastings –cofundador de la compañía-, de tener un mes de prueba gratuito aunque sin películas de estreno.
Este miércoles 7 también se lanza oficialmente en Argentina, Paraguay y Uruguay. En Argentina el precio será de 39 pesos argentinos, mientras que en Paraguay y Uruguay, el servicio costará 7,99 dólares al mes.
El jueves 8 de septiembre se suman a la región Bolivia, Colombia, Venezuela, Perú y Ecuador, llegando un día después al resto de la región. Se planea lanzar Netflix en Europa a partir de 2012.
Es interesante pensar en cómo afecta la entrada de un servicio extranjero de este tipo al resto de los competidores que encontrará en América Latina. En Argentina la cablera Cablevisión ya lanzó algo de este estilo junto con ESPN, aunque no compite directamente con Netflix. En esa misma región se encuentra Telefónica con su servicio de video online On Video, quien sí sería un competidor directo.
En Chile, la cablera VTR junto a Admotion TV, ofrece desde hace unos meses a sus clientes, un servicio donde por el mismo abono mensual que pagan por tener cable en su televisor, tienen a su disposición una gran cantidad de programas, películas y videos musicales para ver online.
De todas maneras, el mayor competidor que encontrará Netflix en América Latina será sin duda alguna, Cuevana, donde los usuarios pueden ver cualquier tipo de contenido, sea película, serie, documental e incluso canales locales de Argentina, sin registración, ni costo, ni limitación alguna. Si bien este último no cuenta con acuerdos de derechos de autor, y por lo tanto no representa una alternativa legal, tiene aproximadamente 300.000 usuarios.
A partir de lo dicho anteriormente, se espera que este tipo de modelo tenga mucho más crecimiento, y por lo tanto que decaiga proporcionalmente el servicio de cable pago para televisión, como ya lo hizo con la caída de BlockBuster el servicio de alquiler de películas. Será entonces para este tipo de modelo residual, cuestión de adaptarse a la nueva era o bien sucumbir en el intento.