En el anterior artículo sobre cómo expandir la memoria RAM para darle mayor potencia y fluidez a nuestro equipo ya os explicamos el proceso para reconocer y comprar el tipo de memoria compatible con nuestra placa base. En esta segunda parte del tutorial nos centraremos en la instalación de dicha memoria, un paso que muchos pensarán que es muy delicado, pero que se puede solventar sin problemas siguiendo los consejos que aquí daremos.
Retomemos el proceso donde lo dejamos en la primera parte. Ya hemos adquirido la expansión de memoria RAM compatible con nuestro equipo, y ahora debemos instalarla en algún slot libre de nuestra placa base. Este proceso podemos realizarlo nosotros mismos, sin tener que llamar a algún técnico «profesional» que cobre a precio de oro la mano de obra. Solo hay que ser cuidadoso y seguir al pie de la letra los pasos que iremos dando en este tutorial. Lo primero es conseguir un destornillador y «desnudar» nuestro equipo, quitándole los revestimientos laterales de la caja, para poder acceder a la placa base.
Cuando localicemos la placa base, hemos de encontrar los slots o espacios libres en ella, para colocar las nuevas expansiones de memoria RAM. Estos slots libres estarán pegados a las memorias ya instaladas, así que no será complicado reconocerlos. Cuando los tengamos localizados, solo tendremos que poner en ellos las nuevas memorias RAM y ejercer cierta presión en su extremo, hasta escuchar un click, que nos hará saber que se han fijado correctamente a la placa. Las dos pestañas de plástico habrán quedado fijadas perfectamente, y la nueva memoria se mantiene fija en esa posición. ¿No era tan complicado, verdad?
Se puede dar el caso de que queramos modificar toda nuestra RAM, sustituyendo las memorias antiguas por otras nuevas, y queramos quitar esas memorias antiguas. Para ello debemos aflojar la solapa de plástico que las mantiene fijadas a la placa, hasta que cedan (sin hacer movimientos demasiado bruscos, por supuesto), y una vez que las hayamos quitado, colocar las nuevas memorias tal y como explicamos arriba. Cuando todo esté ya en orden y a nuestro gusto, colocaremos de nuevo las tapas laterales de la caja del equipo.
Hecho esto, procederemos a comprobar si el ordenador reconoce la nueva memoria RAM, como debería ser. Lo encenderemos y clickaremos en el elemento de Mi PC con el botón derecho, para acceder a Propiedades. En esa ventana nos aparecerá la memoria RAM actual del equipo, y podremos comprobar si tenemos más que antes, dando por hecho que nuestro montaje ha surtido efecto. Ya solo nos queda disfrutar de la nueva y mejorada potencia de nuestro ordenador, y no volver nunca más a fastidiarnos por su lentitud.