La policía en Brisbane, Australia, tiene un plan para combatir las redes Wi-Fi sin protección y evitar que los delincuentes se beneficien del robo de datos personales.
En la ciudad de Queensland, hay policías que recorren los barrios residenciales con ordenadores portátiles tratando de conectarse a redes Wi-Fi. Cuando detectan una red con poca o ninguna protección, los agentes envían la información al propietario de la red y le sugieran diversas formas de fortalecer la seguridad de las mismas (deberán leer nuestro artículo al respecto).
Según informa Mashable, días más tarde, la policía regresa al sitio donde encontró un red poco protegida para verificar que los responsables han cumplido con las instrucciones que les dieron.
La policía espera conseguir parar a los criminales que venden acceso a Internet de otros y que roban los datos personales de los usuarios. No se como serán en Australia, pero en España los que roban la conexión a internet lo hacen para evitar tener que pagar un factura y poder descargarse las series y películas que quieran…
Saludos desde lo más profundo de los bytes.