Sin duda de un tiempo a esta parte una de las característica más usada de un smartphone es su cámara fotográfica. En muchos casos más usada incluso que las llamadas o los mensajes. Por eso hemos llegado a un punto en el que dicha cámara ha podido sustituir en muchos casos a las cámaras compactas que todos teníamos hace unos años.
Esto ha sucedido porque hemos pasado de las primeras cámaras en teléfonos móviles meramente testimoniales muy básicas con una calidad más que mediocre a unas cámaras avanzadas, con unas funciones software increíbles y a veces nunca vistas ni en las cámaras compactas convencionales como sl photosphere de Google.
En este punto en el que nos encontramos en el mercado nos encontramos con la cámara que nos proporciona el nuevo buque insignia de Samsung, el Samsung Galaxy SIV. Aquí vamos a intentar analizar la cámara del nuevo terminal de Samsung, desde sus capacidades ópticas y las multiples funciones software avanzadas que nos proporcionará.
Como hemos dicho antes las cámaras de los últimos smartphones cada vez disponen de más utilidades y caracterísitcas, sobre todo software. Samsung por tanto no iba a ser menos con su buque insignia y nos trae una cámara repleta de nuevas y fantásticas características. Sin embargo a veces todas estas funcionalidades pueden entorpecer y hacer más engorroso el uso de un cámara que sobre todo queremos que sean rápidas en tomar un vídeo o una foto que es una de las características de las tomas realizadas con un smartphone.
Dejando a un lado todas las características que incorpora el Samsung Galaxy SIV, que muchos verán como complicaciones, y centrándonos únicamente en lo que ha montado Samsung en su smartphone debemos dejar claro que el sensor de 13 Mpx es muy muy bueno. Si bien es verdad que no todas las tomas que hemos realizado han salido con un resultado idóneo, siendo esto debido sobre todo a no poder superar las condiciones deficientes de luz, la gran mayoría de las tomas han tenido un resultado más que satisfactorio.
Obviamente encontraremos una gran diferencia entre las tomas realizadas en el exterior con una gran cantidad de luz, que nos dará unas brillantes y coloridas fotografías, con aquellas tomadas en el interior donde, sin presentar un mal resultado, si que puede echarse de menos algo más de nitidez y menos ruido en la imagen tomada. Pero de todos es conocido que este es uno de los grandes defectos de las cámaras compactas y en mayor medida de las cámaras incorporadas en smartphones.
El salto que ha dado Samsung incorporando una sensor de 13 Mpx en lugar del sensor de 8 Mpx que incorporaba el antecesor del Samsung Galaxy SIV ha proporcionado una característica que va más allá del mero aumento de tamaño de la fotografía tomada aunque sí relacionado con este. Al disponer de un mayor tamaño en la fotografía se puede hacer un post-procesado de la fotografía que incluya un recorte o un enfoque a una determinada zona de la imagen original sin que esto signifique una perdida de detalle para ver la foro en la pantalla del teléfono o incluso para que esta sea imprimida en papel en tamaños estándares como 10x15cm o13x18cm.
Un acierto por parte de Samsung ha sido programar la tecla de volumen para disparar el obturador de la cámara. Esto es extremadamente útil a la hora de realizar autoretratos pues la posición de los brazos queda más natural como se puede observar en la imagen anterior.
Una característica que ha incorporado Samsung en la cámara del Samsung Galaxy SIV ha sido el modo ráfaga. Si somos totalmente sinceros este modo ha sido tomado prestado de HTC por parte de Samsung. En este modo el smartphone es capaz de tomar una fotografía cada 0,133 segundos, dando una tasa de 20 imágenes por segundo.
La calidad de vídeo tomada por la cámara del Samsung Galaxy SIV es muy buena. Se ve brillante y muy agradable a la vista sobre todo cuando se hace la secuencia usando el modo 1080p que proporciona al vídeo tomado una nitidez muy alta. Si bien es cierto que el registro del sonido no es todo lo bueno que podríamos esperar, pero es que estamos hablando de un smartphone y para lo que se necesita en este tipo de dispositivos es más que suficiente.
Una de las cosas en las que más empeño ponen los fabricantes en cuanto al software de control de la cámara es que las múltiples opciones se encuentren lo más accesibles al usuario. Para ello Samsung ha incorporado en el Samsung Galaxy SIV el software de control de la cámara compacta de 16 Mpx que funciona bajo Android y que ya comercializa la compañía coreana,
De todas las distintas funcionalidades que ha dotado Samsung al terminal me quedo con el doble disparo. El doble disparo que también está presente en algunos smartphones de la competencia como LG, consiste en usar las dos cámaras disponibles en el Samsung Galaxy SIV para tomar dos fotografías y combinarlas como se puede ver en la imagen. Esto nos proporciona una manera bastante útil y sencilla de que quién esté tomando la fotografía pueda aparecer en la misma aunque sea a modo de recuadro.
Otras funcionalidades que incorpora la cámara del Samsung Galaxy SIV son el modo Drama que se usa para situaciones de cámara muy bien planificadas, que también está presente en algunos HTC, o el modo ereaser que también está presente en teléfonos HTC y que nos permite borrar objetos o personas en primer plano dejando el fondo intacto.
Otra función muy interesante que incorpora el terminal de Samsung es la posibilidad de realizar una toma incorporando una pequeña nota de sonido que la acompañe a modo de comentario de la foto. El problema de este modo es que es completamente inútil si la persona que va a recibir la foto no dispone de otro Samsung Galaxy SIV pero si puede ser útil para describir la foto para nosotros mismos. También incorpora modos HDR o panorámico.
Una cosa que sí nos ha llamada la atención por su ausencia es la no presencia de la característica photosphere nativa de Android. Según Samsung es porque el hardware de la cámara presenta una serie de incompatibilidades con este modo aunque no está del todo confirmada esta razón para justificar la ausencia de photosphere.
Como veis estamos ante una gran cámara fotográfica por su sensor y circuitería pero a la vez estamos ante un software que proporciona muchas herramientas de pre-producción y post-producción para hacer un tratamiento en tiempo real mientras que se toma la fotografía o un post-proceso una vez tomada. Todo esto con una extremada sencillez que es lo que busca cualquier usuario de una cámara en un smartphone.