A día de hoy el HTC One es uno de los terminales más atractivos del mercado. Entre otras cosas que han ayudado a hacer del HTC One un terminal apetecible para el gran público es el chasis unibody de aluminio. Este atractivo diseño tiene detrás un proceso de fabricación donde intervienen las más altas tecnologías.
Tal y como podemos observar en el vídeo que acompaña a esta entrada el diseño sin fisuras ni partes móviles del HTC One ha sido posible gracias a tecnologías como el grabado electroquímico y a una maquinaria de precisión que hace uso de un diamante para realizar cortes, convirtiendo un trozo de metal «virgen» en un fantástico chasis unibody.
Lo que está cada vez más claro es que la tecnología nos permite crear cosas cada vez más sofisticadas con un menor coste. No podemos olvidar que muchos fabricantes se van a pasar a los chasis de aluminios y que muy probablemente el siguiente fabricante que haga uso de este tipo de chasis sea Samsung.