Prácticamente desde que salió el iPhone original allá por 2007 las pantallas usadas por Apple en sus productos han sido una referencia para todo el sector siempre estando las pantallas de los dispositivos Android algo por debajo. La verdad es que en los últimos años las diferencias entre las pantallas de los dispositivos Android han ido recortando la distancia con respecto a las pantallas de Apple. Este recorte ha sido liderado por Samsung y ahora que se ha presentado el nuevo Samsung galaxy S4 de los coreanos no cabe otra pregunta si la pantalla de éste ha logrado igualar o superar a la del iPhone 5, último terminal de Apple.
Lo primero que hay que tener en cuenta al comparar las pantallas de ambos dispositivos es que nos encontramos con dos pantallas fabricadas cada una con una tecnología diferente. Por un lado tenemos la tecnología SuperAMOLED de Samsung en su terminal estrella y por otro lado disponemos de la tecnología LCD usada por Apple para su último iPhone.
Nivel microscópico
Empecemos por lo que no se ve. Aunque suene paradójico empezar por lo que no se ve cuando se están analizando pantallas suya función es mostrarnos imágenes. No obstante un análisis microscópico de las pantallas puede darnos mucha información acerca de ellas.
La gama de colores en la pantalla del S4 es más baja que en la pantalla del iPhone 5. Este hecho en realidad demuestra una peor calidad. Muchos piensan que las gamas tienen que ser alta para una imagen mejor, pero en realidad lo que se consigue con una gama alta son imágenes demasiado contrastadas que se comen información. En nuestro análisis nos encontramos con que el S4 tiene 122% y el iPhone 5 lidera esta categoría con 104%. No obstante en este apartado la pantalla del Samsung Galaxy S4 ha mejorado con respecto a su antecesor pues el Samsung Galaxy S3 tenía un 139%.
Otro punto de vista a tener en cuenta en este mundo microscópico de las pantallas es el número de subpixeles y en este caso observamos que en pantallas PenTile, el tipo que encontramos en las Super AMOLED, encontramos el doble de subpíxeles rojos y azules y que por tanto la la reflexión de colores bastante mejor que en el iPhone 5.
Eficiencia – consumo
Este es uno de los puntos más importantes de una pantalla pues como sabemos gran parte del consumo de un smartphone actual se debe a la pantalla. Por tanto veamos qué consumo de energía ofrece cada pantalla. Por un lado tenemos que el Samsung Galaxy S4 proporciona la cifra de 0,70 W. Mientras que por su parte la pantalla del iPhone 5 es la más eficiente con 0,66 W, pero la diferencia con lo último de Samsung es muy poca, por lo que vemos como la tecnología OLED está mejorando cada vez más. De hecho, la tecnología OLED es bastante joven y todavía tiene mucho camino de mejoras que recorrer cosa que no le ocurre a la tecnología LCD empleada por Apple.
Conclusiones
A la conclusión que podemos llegar tras este estudio que os presentamos es que quizás la pantalla de los terminales Apple ha estado por delante durante bastante tiempo pero que a día de hoy pantallas como la del Samsung Galaxy S4 en el mundo Android están muy cerca de la que nos proporciona el iPhone 5. Quizás la pantalla de Samsung sea la mejor del mundo Android seguidas muy de cerca por las del Sony Xperia Z o del HTC One.
¿Y vuestra experiencia qué os dice?