Desde que entré en el mundo Android, he sido un amante de HTC. Viniendo de Nokia, la construcción es un aspecto muy importante que siempre he tenido en cuenta. De Samsung, su tecnología de pantalla como sus materiales, me han echado para atrás siempre que he visto alguno de sus dispositivos.
A día de hoy, tenemos dos dispositivos luchando por el primer puesto en la cima de Android, el Samsung Galaxy S4 y el HTC One, no creo que podamos decir nunca cuál es mejor de los dos. Si nos referimos simplemente a ventas, Samsung saldrá claramente ganador, no hay dudas de que, probablemente, sea el dispositivo más vendido de este año y de la propia Samsung.
En este artículo de opinión, trataré de ser lo más objetivo posible, aunque dejo claro mis antecedentes y, como el título indica, mi decisión. Espero poder ayudar a los indecisos y dar un punto de vista diferente a muchos, que permita apreciar otros aspectos importantes de un dispositivo, mas allá de sus características técnicas y programas, su filosofía.
En primer lugar, aclarar que, pese al título, la potencia y software es lo que está primando en casi todos los nuevos dispositivos y ninguno de nosotros queremos un móvil desactualizado y que no mueva las aplicaciones con fluidez. Pero eso, creo que ya lo hemos alcanzado sobradamente con el doble núcleo y 1 GB de RAM.
Actualmente, vemos como predominan los 2 GB de RAM con un procesador Quad-Core en la gama alta, incluso Octa-Core en caso de una versión del Samsung Galaxy S4, aunque sea para ahorro de energía. Algo, muy bueno para muchos e innecesario para otros, y es que hemos visto hace muy poco como 2 núcleos con 1 GB de RAM, considerados tope de gama en la generación pasada, no le ponían pegas a mover cualquier aplicación, salvo mala optimización de la misma.
Llegados a este punto, hasta los que queremos un S4 o un One, sabemos que de potencia van más que sobrados, por tanto, podemos considerar que llegados a este punto, la potencia es un factor que no hace falta mirar en un smartphone de gama alta, ya que apenas notaremos diferencia en la práctica, incluso con dispositivos de generación anterior, salvo en mínimos detalles. No hay que olvidar también, que al querer un dispositivo de estas características, estamos pagando el sobreprecio de una marca conocida y un buque insignia de dicha marca. Especificaciones que en un smartphone de marca blanca o una de las nuevas marcas chinas que empiezan a coger una importante cuota de mercado, tendrían un precio inferior, por ello debemos tener en cuenta otros aspectos de la marca que no sean puramente las especificaciones, que las marcas chinas no tienen. No paramos de ver dispositivos chinos con 4 núcleos y pantallas 1080p de gran tamaño, a un precio de escándalo que moverán las cosas de forma similar a un smartphone de gama alta.
Como las compañías saben esto, han dado valor añadido con software, diseño e inteligencia en aprovechar el hardware, tanto HTC como Samsung. Un ejemplo claro es que ambas son las primeras y, a día de hoy, únicas compañias que integran infrarrojos para controlar la televisión con el móvil.
La lucha del software ha empezado hace poco y Samsung se ha decidido a ganarla con la mayor ventaja que pueda, para respaldar la imagen conseguida gracias a su publicidad.
Por tanto, en sus nuevos dispositivos clave, vemos como esto se muestra de forma considerable. En Samsung hemos visto como han llenado su móvil de aplicaciones para facilitarnos muchas labores cotidianas y cómo el software ha querido integrarse con todos y cada uno de los sensores del móvil. Creo lo han logrado sobradamente aunque muchos se quejen de que, entre Android y las aplicaciones de Samsung, el dispositivo se comen casi 8 GB de almacenamiento…
HTC por otra parte ha añadido pequeñas mejoras de software, nada destacables, pero ha pulido y limpiado su interfaz, buscando el menor consumo de recursos. Ha dado más importancia a crear un dispositivo inteligentemente, basándose en lo que los usuarios buscan realmente. No es raro oír en sus charlas resultados de encuestas de uso de smartphone para avalar algunas de sus características. Los altavoces delanteros son un ejemplo de ello.
Diferencias entre los dispositivos.
– Por parte de Samsung, tenemos 5 pulgadas en el mismo espacio delantero que el S3, frente a 4.7 pulgadas, porque no caben más sin aumentar el tamaño, en el HTC One. En Samsung tenemos, como en la mayoría de sus dispositivos, la tecnología SuperAMOLED con una calidad mejorada, pero que sigo viendo insuficiente al seguir siendo OLED, que particularmente no me gusta nada por sus colores, brillo y consumo en condiciones de fondo blanco. Algunos de esto parámetros Samsung los ha mejorado bastante, pero aún así, no están de mi agrado, es culpa de la tecnología en sí.
En el otro lado tenemos SuperLCD3; una tecnología cuya calidad de imagen, colores, brillo y ángulos de visión son casi perfectos, no hay nada que reprocharle a este pantalla, el consumo era el dato que me tenía en ascuas y con los últimos resultados se ha visto que consume casi lo mismo que Samsung.
En cuestión de resolución, sobra en ambos dispositivos, desde la resolución 720p en pantallas de este tamaño, ya la diferencia es insignificante. La diferencia de tamaño es el único punto a favor de Samsung al no aumentar el tamaño respecto al S3, pero HTC no ha podido ampliarla al meter los altavoces.
– Samsung ha metido la última tecnología en el S4; la tercera versión de la ram y Gorilla Glass frente a la segunda, sensores de temperatura, presión y humedad, otro sensor extra para los gestos y una pantalla capacitiva de mayor sensibilidad. Por contra, solo le falta Radio FM.
– Por parte de HTC tenemos los altavoces frontales, quitan espacio para una pantalla mayor, pero muchos los llevamos hemos dicho «¡por fin!» cuando han llegado. Samsung sólo puede competir con Group Play que es una aplicación muy lograda para mejorar el audio con otros dispositivos. Pero aquí es donde podemos ver que puede haber diferencia, a la larga, a favor del HTC. El software de Samsung puede ser sustituible por aplicaciones de terceros, en cambio, dos altavoces frontales, no los va a tener el Samsung más adelante.
– En el Samsung tenemos una cámara de móvil estándar, con buena resolución para hacer zoom (para lo único que vale la resolución en un móvil), con una calidad global de gama alta. Por otro lado, tenemos una cámara con baja resolución, justa para ofrecer un rendimiento con poca luz excelente con poca luz, junto a una óptica de mayor luminosidad. Soy fotógrafo y aprecio mucho el gesto de HTC, a día de hoy, salvo paisajes y fotos en la calle, el resto de fotos que hacemos con un móvil son de eventos o en interiores donde el HTC One se impondría.
– Por último, lo más subjetivo, el diseño. Samsung logra mantener un peso bastante bajo, batería accesible, soporte para microSD interna, acabados en plástico de calidad media-alta intentando mejorar cómo se ven, pero sin destacar. HTC por su parte ha hecho un hito en Android con el mejor diseño que se ha visto, dicho por muchos usuarios de todo tipo de marcas y plataformas. Al HTC le pueden faltar cosas, pero en diseño e inteligencia al pensar en el dispositivo como tal, creo que es insuperable, incluso me cuesta pensar en cómo podría HTC mejorar el móvil en este apartado.
Viendo estas características, sólo veo una mejora significativa cuando lleguemos a los 4 GB de RAM con capacidad para instalar sistemas operativos de sobremesa en estos dispositivos, idea que le ronda a Ubuntu y que en la siguiente generación podría ser la única diferencia destacable. En esta generación, frente a la incapacidad de mejorar enormemente las características actuales, doy mucha más importancia a un diseño, unos altavoces frontales, una pantalla de calidad casi-profesional y una cámara de bastante calidad para situaciones más comunes.
Para los interesados en cualquiera de los dos dispositivos voy a poner mi impresión de cómo conseguir uno de estos a día de hoy.
Según los precios de operadoras, creo que sólo es recomendable comprarlo libre, ya que las operadoras te meten en contratos bastante abusivos si deseas un terminar de estas características. Y en opciones libres, tenemos varias, pero la mejor que he visto en ambos casos es Amazon. En el caso de Samsung, viniendo de un S3, podemos contemplar también la opción de The Phone House al darnos hasta 300 € por el S3, si no, Amazon ofrece el precio estándar y la entrega es bastante pronto, frente a desorganización que pueda haber en tiendas estos primeros meses.
Los precios en Amazon.es son:
- El precio del Samsung Galaxy S4 (16 GB) es de 699 €
- El precio del HTC One (32 GB) es de 645 €
Vemos como la versión del doble de capacidad, en el HTC One, está a 50 € menos. Último punto a favor del HTC bastante importante, porque si hubiera sido al contrario tal vez me hubiera costado comprarlo.
Hay que tener en cuenta que el precio del HTC One se mueve entre 645 € y 675 € en Amazon, por lo que cuando se publique el artículo, puede que el precio sea diferente al escrito.
el HTC ONE sera el mejor smarthpohne del año 2013 no hay duda