Sony ha intentado a crear smartphones que se encuentren en el límite de entre los más cotizados por los usuarios durante el año 2013, es por eso que lanzó en aquel entonces dos teléfonos de alto rendimiento como serían el Sony Xperia Z1 y el Xperia Z con apenas seis meses de diferencia entre uno y otro.
No obstante lo anterior, Sony no ha perdido de vista que uno de los segmentos de mercado más importantes actualmente es la de los equipos de bajo precio y muy buen rendimiento o al menos de un rendimiento competitivo que utilizan Android. El recientemente lanzado Sony Xperia L es quizás uno de los esfuerzos más valorados por los usuarios, el cual se compara con el Nokia Lumia 520 y el Motorola Moto G a un precio que bordea los 200 $ aproximadamente.
En términos de rendimiento y apariencia, quizás uno de los mejores teléfonos que tuvimos oportunidad de ver durante el 2013 fue la creación de Motorola con su diseño Moto G, el que como ya todos sabemos forma parte de Lenovo.
La pregunta crucial es ¿Por qué deberíamos comprar el Sony Xperia M y no otro? Para responder tendremos que esperar la primera mitad del 2014, aunque ya tenemos algunas impresiones al respecto que compartiremos a continuación.
A primera vista la respuesta que tendríamos que dar si nos apuran es que el Xperia M no es un imprescindible, ya que con el Moto G nos sentimos bastante cómodos y cuesta menos dinero.
Diseño del Sony Xperia M
Sony ha implementado un diseño muy parecido en todos sus terminales durante el 2013, enfocándose en la implementación de un diseño atractivo y que utilice de la mejor forma posible los materiales implementados por la compañía, aunque para otros no es más que una copia plástica de lo que ha conseguido Apple con el iPhone.
El Sony Xperia M implementa en esta oportunidad un modelo bastante brilloso en su parte delantera o frontal con un sistema de notificaciones que se deja ver a través del parpadeo de una luz que es bastante práctica.
Los costados y la parte posterior del dispositivo son completamente plásticas. Removiendo la tapa través de los costados, tenemos acceso la batería y a la memoria removible microSD. Quizás este sea el primero de los aspectos negativos que tengamos que destacaron el teléfono, pues no se tiene acceso a la memoria microSD por fuera, ya que tenemos que abrir el equipo para cambiarla.
El nivel de almacenamiento que incorpora el teléfono por defecto es de 4GB, una cantidad que nos parece extremadamente pequeña, donde apenas el usuario tiene posibilidad de usar 2GB.
Volviendo al apartado externo, tenemos que decir que la constitución del equipo en sí nos parece bastante buena, observado en su parte frontal y posterior las terminaciones y el color de los materiales está bien cuidada, mientras que el panel trasero se parece bastante a los modelos Lumia de Nokia.
Uno de los aspectos que valoramos en el desarrollo del nivel de entrada de smartphones de Sony en el Xperia M, es el contar con un apartado frontal totalmente exento de botones físicos, lo cual lo hace lucir limpio y bien diseñado, por lo que tendremos que estar atentos a la pantalla para interactuar con el equipo sólo de esa forma. De esta manera Sony se ha posicionado como uno de los seguidores de los controles virtuales impuestos por Google.
Rendimiento del Sony Xperia M
Tal y como lo habíamos predicho, el Sony Xperia M no es el smartphone más rápido del mercado ya que apenas posee un procesador Qualcomm Snapdragon S4 de doble núcleo que corre a 1GHz, el cual utiliza 1GB de memoria RAM, lo que no es suficiente para desenvolverse con soltura en todos los escenarios pero es mucho mejor que alternativas de la competencia.
En la prueba que se hizo del dispositivo con juegos como Angry Birds Star Wars y otros con contenido 3D, el desempeño del smartphones fue bastante fluido, y nos dejó satisfechos.
El sistema operativo que se incluye es Android 4.1.2 Jelly Bean, aunque reformulado a través de la interfaz exclusiva de Sony, la que en esta oportunidad es más funcional que nunca e incluye características que no llaman la atención del mercado pero son bastante similares a las incluidas por HTC y Samsung.
La vida de la batería es uno de los aspectos más impresionantes del Sony Xperia M, ya que siendo solo de 1750mAh, nos alcanza a durar dos días en uso moderado, revisando algunos medios, tomando algunas capturas de pantalla y jugando algunos juegos, aunque teniendo la precaución de dejar el teléfono durante la noche en modo avión.
Pensamos que la buena administración de la batería se debe principalmente al posee una pantalla de calidad mediana, ya que en la mayoría de los se smartphones lo que más consume energía es esta parte del equipo.
Parte de las principales características de estos teléfonos son el contar con conexión NFC, una pantalla de cuatro pulgadas y una resolución de 854 × 480 px, la que se combina con 244 px por pulgada. Si lo comparamos con el Motorola Moto G que posee 326 px por pulgadas e incluso el Nexus 4 que tiene 318 px por pulgada, la alternativa de Sony se encuentra al menos 100 px por pulgada por debajo del estándar.
Tanto las imágenes como los textos lucen relativamente nítidos o detallados, en comparación con otros móviles del mercado que se comercializan al mismo precio, pero eso no quiere decir que entre una mala calidad de imagen.
La inclusión de una cámara de 5 Mpx con flash LED que no nos impresiona para nada y tiene un rendimiento bastante regular. Quizás la implementación del modo enriquecido “HDR” sea la nota alta que intentó entregar Sony, opción que no se encuentra disponible en teléfonos de este precio, pero que lamentablemente no funciona del todo bien en el Xperia M.
la capacidad de grabación de vídeo se sitúa en los 720p, por lo que no hay posibilidad de capturar en Full HD. En este sentido hay que ser claros, pues no podemos esperar de un teléfono de este precio la posibilidad de capturar imágenes con definición muy detallada, por lo que la reproducción del mismo es relativamente buena.