Siempre han existido los sucedáneos de cosas que por caras o malas para la salud han sido tomadas como sustitutos de éstos. Algo parecido vivimos en su momento con la aparición de los cigarrillos electrónicos después de que se aprobara la ley antitabaco por el anterior ejecutivo en España. Lo normal es que este mismo concepto se aplicara a otros productos de similares características aunque de dudosa legalidad, al menos en España. Por eso ha tenido que ser en Holanda donde se inventase el «Porro electrónico«.
Como decimos, en pleno auge de los cigarrillos electrónicos ha sido en Holanda donde la empresa E-Njoint ha desarrollado el primer Porro electrónico del mundo. El invento se consume en fiestas de baile de moda, eventos musicales, bares, clubes y demás lugares y para que tengáis una idea de lo exitoso que ha sido en ese país os dejamos, a modo de ejemplo, la cifra de 10.000 porros electrónicos fabricados al día. Por ahora se venden en toda Europa en tiendas de cigarrillos normales y es 100% legal al no contener THC, tabaco o nicotina.
Su diseño presenta la forma típica de un porro, y se enciende una hoja verde de cannabis en la boquilla plateada cada vez que el usuario da una calada. Está disponible en seis sabores de fruta diferentes. A todo eso se une que son los propios usuarios los que pueden rellenar el porro eléctrico con su propio contenido con líquido de cannabis.