Creo que no tendríamos que dar ninguna razón para evitar que una madre fume en el embarazo, ya que hacer lo contrario es algo que se escapa de lo que puedo comprender…pero quizás lo que os contamos hoy pueda ayudar a alguien a evitar esa tentación.
Según lo que hemos podido saber por las conclusiones de un grupo de investigadores de Inglaterra a partir de un estudio que realizaron, si la madre fuma durante el embarazo, el feto es muy probable que oculte su rostro y lleve las manos a su boca.
Parece que los bebés en el vientre de sus madres lo tienen claro…y no les gusta que ellas fumen.
El estudio se realizó con un grupo de 20 mujeres embarazadas de las universidades de Durham y Lancaster, a fin de verificar cómo los fetos respondían al humo de tabaco.
Ya se sabía que si las mujeres fuman durante el embarazo, el riesgo de complicaciones de salud en el niño es mayor.
Lo que hemos podido saber ahora es que el feto de madres fumadoras se mueven más y llevan sus manos a la cara en un 58% y cubren su boca en 69% de los casos.
Este movimiento indica que el sistema nervioso central de fetos de madres fumadoras no se desarrolla al mismo ritmo de las madres no fumadores.
«Nuestro estudio concluye que el stress y la depresión tienen un impacto en los movimientos fetales, pero aún más la exposición a nicotiva también tiene un efecto sobre el desarrollo fetal y es superior a los efectos del estrés y la depresión,» Según indicó la Dr Nadja Reissland, coordinadora del estudio.
Los investigadores analizaron 80 imágenes de ultrasonidos de 20 fetos capturadas a las 24, 28, 32 y 36 semanas de embarazo. Cuatro de estas madres embarazadas fumaban 14 cigarrillos por día, mientras que las 16 restantes no fumaban nada.
Ahora el estudio avanza hacia su fase dos, donde se debería estudiar los resultados con un conjunto mayor madres, estudiando cuales son los resultados entre 60 embarazadas fumadoras y 60 no fumadoras.
Saludos desde lo más profundo de los bytes.