Apple es noticia estos día y no sólo por los coches autónomos de Apple, sino por cuestiones monetarias. La deuda de Apple con Irlanda llega a los 13.000 millones de euros. Los impuestos de Apple que adeudan al fisco de Irlanda llegan a los 13.000 millones de euros, pero este país no quiere aceptar el dinero. El Gobierno irlandés está recurriendo a la decisión de la Comisión Europea, ya que la considera perjudicial para su estrategia tributaria. Apple ya ha aceptado pagar, pero está trabajando con Irlanda para revertir el resultado del proceso.
Los impuestos de Apple con Irlanda ascienden a 13.000 millones de euros
Apple acordó con la Unión Europea un plan de pago para el importe que el organismo dice que está pendiente a Irlanda por impuestos no cobrados a la empresa exigidos por las ayudas ilegales concedidas por Dublín. El valor, que llega a los 13.000 millones de euros, fue retenido por el gigante norteamericano con la ayuda de refugios fiscales y offshore. El gigante de la tecnología ha tratado de llegar a un acuerdo con el Gobierno de Irlanda para comenzar a pagar dicha suma multimillonaria a partir del primer trimestre de 2018.
La devolución del dinero fue determinada por la UE en 2016, pero Irlanda se mantuvo reticente a cobrar el importe, ya que el país aplica impuestos reducidos a las empresas para atraer inversiones extranjeras. Estas condiciones, que se traducen en contribuciones tributarias de apenas el 0,005% sobre todos los beneficios europeos de un determinado negocio, llevaron a empresas como Apple a fijarse en ese territorio como forma de escapar a regímenes financieros más exigentes. Tim Cook ya se hizo oír con respecto a esta decisión y apodó la decisión comunitaria como una «total porquería política».
Debido a la «inercia» irlandesa, la UE apeló al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) para que obligara al gobierno local a recoger los impuestos que se le debían. Como consecuencia, Paschal Donohoe, actual ministro de Finanzas de Irlanda, ya ha declarado públicamente que el país espera comenzar a recibir el dinero a partir del primer trimestre de 2018.
A pesar del acuerdo, tanto Apple como el Gobierno irlandés recurren la decisión comunitaria. «Tenemos un equipo trabajando diligente y rápidamente con Irlanda [en este proceso]», escribe Apple en un comunicado enviado al The Wall Street Journal. En conclusión, la tecnología de Cupertino afirma además que «tiene confianza» en la reversión de la decisión de la Comisión Europea, así «que todas las pruebas sean analizadas».
A su vez, el dictamen suponía una reprimenda para el gobierno Irlandes, ya que dejaba claro que los beneficios fiscales concedidos por el Gobierno local al gigante de la manzana iban en contra de la legislación comunitaria.