¿Eres de los que piensa que el Samsung Galaxy S III es el mejor móvil del mercado, pero te gustaría algo un poco menos «ostentoso» y más manejable? Pues aquí te presentamos un terminal nuevo, el Meizu MX 4-Core, un teléfono de cuatro núcleos que poco tiene que envidiar en cuanto a hardware al buque insignia de Samsung. Muchos desconfían al desconocer la marca Meizu, pero si lees éste análisis te darás cuenta de que hay que desterrar de una vez eso de que en China no se hacen móviles de gama alta.
Meizu es una marca china que se encarga, desde hace tiempo, de la fabricación de teléfonos móviles. Forma parte de esa hornada de nuevas marcas chinas, como Huawei o ZTE, que tratan de expandirse y ganarse un sitio también en el mercado occidental. En este sentido, Meizu acaba de lanzar su terminal estrella, el MX 4-Core, que como su nombre indica, posee cuatro núcleos, y tiene un hardware comparable al mismísimo Galaxy S III, eso sí, con una pantalla más pequeña, de «solo» 4 pulgadas.
Hablamos de un teléfono sencillo por fuera pero tremendamente potente por dentro, con un procesador de cuatro núcleos Exynos a 1,4 GHz, GPU Mali-400, 1 Gb de RAM (aquí no llega a la altura del SGS III) y la propia versión de Android Ice Cream Sandwich de la firma, llamada FlyMe OS, una ROM propia que estiliza y adecua las funciones de Ice Cream Sandwich a las características del teléfono, que son las siguientes:
- Pantalla Sharp qHD de 4 pulgadas a resolución 960×640 píxeles.
- FlyMe OS, ROM propia de Meizu basada en Android 4.0 Ice Cream Sandwich.
- Procesador Exynos Cortex A-9 de cuatro núcleos a 1,4 Ghz.
- 1 Gb de memoria RAM.
- GPU Mali400.
- 32/64 Gb de almacenamiento interno.
- Cámara de 8 megapíxeles con retroiluminación.
- Cámara frontal VGA.
- Conectividad 4g/LTE, Wifi, Bluetooth y GPS.
- Puerto microUSB,
- Batería de 1.700 mAh.
- Medidas: 121.3×63.3×10.3 milímetros.
- Peso: 139 gramos
Viendo sus características, no cabe duda de que el Meizu MX 4-Core es un terminal de gama alta, con muy buenas prestaciones, aunque no hay rastro de conexión HDMI, ni tampoco de una ranura para tarjetas de memoria, aunque teniendo en cuenta la memoria interna de almacenamiento, seguramente no sea necesaria. Lo que sí puede ser un «problema» es la batería, ya que parece demasiado corta para un terminal con semejantes características. Cierto es que la ROM personalizada de FlyMe nos ayudará a exprimir el potencial del teléfono al máximo.
Después de estar un mes a la venta en el mercado chino, con un gran acogida por parte de los usuarios, el teléfono ha sido lanzado mundialmente, a un precio no precisamente barato. La versión de 32 Gb cuesta 650 dólares, y la de 64 Gb sube hasta los 750 dólares, precios que consideramos demasiado altos tratándose de una marca que todavía no ha conseguido un nombre fuera de China, y sobre todo, comparándolos con los de sus competidores, sobre todo Samsung y Apple, que se quedan por debajo.