Hace unos días hablábamos en nuestro blog de los problemas que vienen acentuados en el iPhone 5s y que en realidad las anteriores generaciones de iPhone no tenían. Me refiero a la inexactitud de la brújula y del sensor de nivel que analizamos en su momento, y que comparados con el iPhone 5 y con el iPhone 4s dejan mucho que desear. El tema ha llamado la atención de expertos, porque si bien los errores con la WiFi o la poca autonomía de las baterías son en realidad una dinámica bastante común en Apple, estas historias es la primera vez que ocurren, y dado que ya son veteranos los de la manzana no tenía demasiado sentido.
Sin embargo, ahora todo empieza a encajar, y al parecer estos problemas en el iPhone 5s en sensores brújula y nivel se deben al cambio de proveedores que Apple decidió casi a última hora, y que como confirman en la red, el CEO di RealityCap Eagle Jones ha descubierto la base del problema. Mientras que hasta la generación iPhone 5 la compañía de la manzana apostaba por un sensor STMicroelectronics, con el nuevo terminal iPhone 5s utiliza un Sensortech BMA220 de Bosch.
Pese a que ambos componentes ofrecen características similares, pero en el caso de la última elección el nivel de inexactitud es mayor, y se amplifica aún más por el hecho de que Apple no ha tocado el software para hacerlo compatible con el nuevo componente. Es decir, hay problema con el hardware, pero si Apple hubiera retocado el software, el usuario final no hubiera notado estos fallos tan graves con brújula y nivel. ¿La solución? Una próxima actualización que haga los cambios necesarios a nivel software y que compense esas diferencias. de momento, los desarrolladores con apps que se sirvan de esos sensores deben hacer estos retoques de forma individual si esperan un funcionamiento exacto.