Minecraft, el popular juego de ordenador, se enfrenta a una investigación en Turquía tras ser acusado de ser demasiado violento.
Inexplicablemente, según informa el sitio web turco Haberturk esta semana, la ministra de políticas familiares y sociales del país, Aysenur Islam, expresó su preocupación por el contenido de Minecraft hablando con la prensa frente al Parlamento de Turquía el viernes, cuando un periodista sugirió que Minecraft representa la violencia contra las mujeres y podría promover la agresión mediante la concesión de puntos por matar a algunos de sus personajes. Sin embargo, los expertos dicen que la investigación al juego es infundada.
«Examinaremos el juego y ver si hay un elemento de violencia», dijo Islam en respuesta. Añadió que la investigación de Turquía podría dar lugar a una prohibición de Minecraft a nivel nacional, algo que parece inverosímil, aunque no ofreció más detalles con respecto a la investigación.
Con más de un millón de jugadores de todo el mundo, Minecraft es a menudo considerado como un juego relativamente pacífico en el mercado, en comparación con muchos otros, como la saga de RPGs Dragon Age, o la saga de shooters Call of Duty, por citar algunos de entre la multitud. Ha sido aprobado para niños de siete años o más en la mayor parte de Europa, y 10 o más años de edad en los Estados Unidos.
El Dr Andrew Przybylski, psicólogo experimental e investigador del Oxford Internet Institute de la Universidad de Oxford, asegura que «Ordenar que Minecraft sea investigado por ser violento es el equivalente a ordenar una investigación sobre la violencia en los juguetes de Lego.»
Según Jonathan Jordan, editor británico de Games Magazine «Minecraft es uno de los últimos video juegos en que podría pensar acerca de una prohibición en base a contenidos violentos». «Minecraft no es más violento que el Señor de los Anillos», dijo. «Hay espadas, arcos y flechas, pero la mayoría del ataque es contra monstruos y criaturas en lugar de seres humanos.»
En lugar de promover la violencia, Jordan sostiene que Minecraft en realidad fomenta una experiencia de juego diferente, más creativa. «En todo caso, Minecraft ha empujado las cosas de otra manera, dando a los jugadores la posibilidad de crear en lugar de luchar», dijo, y no le falta razón. Estas declaraciones contrastan con las de la ministra de Turquía, que demuestra no conocer demasiado la realidad del mundo de los video juegos.
La censura se ha vuelto cada vez más común en Turquía en los últimos años, con la adopción de medidas para restringir o prohibir el contenido en las plataformas de medios sociales como Twitter, Facebook y YouTube. El año pasado, el ejército turco prohibió proyectar Juego de Tronos en sus escuelas militares, después de decidir que era inadecuado para sus jóvenes reclutas.
Lo mejor que puede hacer la ministra turca, en mi opinión, es jugar unas horas a Minecraft con los más pequeños. Tal vez sería más razonable conocer algo, antes de querer censurarlo.