Excel es una aplicación perteneciente a la suite ofimática de Microsoft que se ha convertido en el pan de cada día de muchos trabajadores, ya que sus hojas de cálculo pueden usarse para una infinidad de tareas financieras y contables que van desde llevar el control de los ingresos y egresos de una empresa, hasta analizar los datos de clientes.
En la primera parte del tutorial para reparar archivos corruptos de Microsoft Excel pudimos ver algunos métodos, que en algunos casos pueden funcionar, mientras que en otros no. Para los que quieren seguir intentándolo, a continuación les presento nuevos métodos para recuperar sus archivos dañados de Excel.
4. Abrir el archivo en Word o Wordpad.
Podemos intentar abrir nuestro archivo corrupto de Excel en Microsoft Word o Wordpad. Para tal fin debemos contar con el «convertidor de Microsoft Excel» disponible desde el sitio web de Microsoft.
Una vez convertido nuestro archivo, procedemos a abrirlo con alguno de los programas anteriormente mencionados. Aunque sea posible abrir los ficheros, no podremos recuperar:
- hojas de módulos,
- hojas de diálogos,
- hojas de gráficos,
- hojas de macros,
- gráficos incrustados,
- celdas de fórmulas.
Por este método sólo será posible recuperar los resultados de las fórmulas que están en las celdas, y los códigos de Microsoft Visual Basic de los módulos y módulos de clase de los libros de Excel que contienen macros. Para encontrar estos códigos buscaremos las palabras «Sub» o «Function«.
5. Crear un enlace al archivo dañado.
Este método nos permitirá recuperar solamente los datos de nuestro archivo, y no las fórmulas ni los valores que se encuentren en éste. Para proceder vamos al menú Archivo – Abrir y nos desplazamos desde la carpeta actual hasta la carpeta que contiene el fichero corrupto. Luego damos clic en «Cancelar«.
Ahora vamos de nuevo al menú Archivo, seleccionamos «Nuevo«, damos clic en «Libro» y pulsamos Aceptar.
En la celda A1 del nuevo libro debemos escribir lo siguiente:
=Nombre de archivo!A1
En donde «Nombre de archivo» debe ser reemplazado por el nombre del archivo dañado. A continuación pulsamos la tecla Enter y deberíamos poder ver los datos de la celda «A1» del archivo dañado aparecer en la celda actual del nuevo libro de trabajo. Entonces, podremos expandir la selección de la celda para mostrar todos los datos pertenecientes a las celdas y columnas del archivo corrupto.
Alternativamente, podríamos seleccionar la celda A1, e ir al menú Edición – Copiar, para luego seleccionar
un área del mismo tamaño que el rango de celdas en uso en el archivo dañado, y luego dar clic en Edición – Pegar.
Con el rango de celdas aún seleccionado volvemos a Edición – Copiar y ahora vamos a Edición – Pegado Especial – Valores – Aceptar, lo cual eliminará los vínculos que pudiera tener el nuevo archivo con el archivo dañado, y solamente mostrará los datos que existían en dicho archivo.