Este año ha sido el año del calentamiento de los smartphones. La salida del HTC One M9 equipando la primer versión del Snapdragon 810 y sus problemas de calentamiento hizo, al principio del año 2015, que nos fijáramos en algo que hasta el momento había pasado desapercibido en el mundo de los smartphones, o al menos no había sido tan comentado hasta este momento.
De hecho, este ha sido la primera vez que una gran empresa como Qualcomm tiene que sacar una segunda versión revisada de su procesador que evita los problemas de calentamiento. Pero, ¿Cómo afecta este calentamiento al funcionamiento normal día a día de tu smartphone?
Eso es lo que vamos a intentar explicarte en este artículo con el apoyo de un vídeo donde se muestra empíricamente como el sobrecalentamiento de un procesador afecta de manera notable en la experiencia de uso del procesador que lo lleva equipado. Esto es lo que se conoce como Thermal Throttling. En concreto vamos a ver un vídeo donde se ejecuta varias veces el benchmark Antutu en 4 procesadores diferentes y vamos a ver como en todos los casos el resultado final, ejecución tras ejecución, baja en todos los casos. Además, podremos ver como este efecto afecta más a unos smartphones que a otros.
El vídeo compara el Samsung Galaxy S6, el OnePlus 2, el Asus ZenFone 2 y el LG G4. El resultado de a cual de los cuatro teléfonos afecta más esta caída de rendimiento por el calentamiento del procesador te lo dejamos en una incógnita para que seas tu mismo quien averigüe al final del vídeo cual de los dos es el ganador de los 4. No obstante, no olvides que aquí lo que se pretende es ver cómo este calentamiento del procesador afecta al uso normal de tu smartphone.