En pleno junio, con noches en las que el termómetro no baja de los 25 grados, la tentación de dormir con el ventilador encendido se convierte casi en una necesidad. Las olas de calor en España se han vuelto más frecuentes e intensas, y cada verano más hogares recurren a este sencillo aliado para sobrevivir a las temperaturas extremas. Pero ¿cuánto cuesta realmente dejarlo funcionando toda la noche?
Dormir con el ventilador encendido: Un gasto casi insignificante
Sergio Llorente, técnico instalador, abordó esta cuestión en un vídeo que se ha hecho viral. Con un ventilador de 50 vatios funcionando a velocidad media durante ocho horas, calculó un consumo total de solo 0,168 kWh por noche. Si aplicamos una tarifa media de 0,15 €/kWh, el gasto sería de apenas 2,5 céntimos diarios. En el escenario más desfavorable, con un coste de electricidad de 0,27 €/kWh, el gasto podría elevarse a unos 11 céntimos por noche. Incluso así, hablaríamos de menos de 3,30 euros al mes, una cantidad mínima si se compara con otras alternativas de refrigeración.
¿Cómo calcular el consumo de tu ventilador?
La fórmula es sencilla:
Potencia (W) × Horas de uso ÷ 1.000 = Consumo en kWh.
Por ejemplo, un ventilador de torre de 70 W encendido durante 8 horas consume 0,56 kWh. A 0,15 €/kWh, eso supone un gasto diario de poco más de 8 céntimos. Puedes ajustar este cálculo al modelo que tengas en casa para obtener una estimación precisa.
Comparado con el aire acondicionado, no hay color
Mientras que un ventilador consume entre 15 y 100 W, un aire acondicionado doméstico puede superar fácilmente los 2.000 W por hora, lo que se traduce en más de 1 euro de gasto por noche. Dormir con el ventilador encendido, en comparación, sigue siendo una opción económica y sostenible.
Consejos para ahorrar aún más
Aunque el gasto sea bajo, hay formas de optimizar su uso:
- Ventilación cruzada: abre ventanas opuestas para mejorar la circulación.
- Temporizadores: programa el apagado automático a mitad de la noche.
- Elige modelos eficientes: un ventilador con menor potencia puede ofrecer la misma sensación térmica con menor consumo.
- Úsalo solo cuando sea necesario: si la temperatura baja, apágalo.
Conclusión
Dormir con el ventilador encendido toda la noche no es un lujo ni una amenaza para tu economía. En la mayoría de los casos, no cuesta más que una botella de agua al mes. Frente al alto consumo energético del aire acondicionado, el ventilador se consolida como una alternativa accesible, eficiente y respetuosa con tu factura eléctrica. Este verano, puedes dormir fresco sin miedo a la próxima factura.
Gracias