Lo cierto es que el software libre está de moda. Tanto que ha pasado a ser hasta un tema de programa de algún partido político de cara a las elecciones. y ya que la actualidad manda, nosotros hoy queremos hablarles de uno de los proyectos que nace bajo las siglas de libre desde un primer momento y que se desarrolla además sobre la base de un hermano mayor conocido por todos que luego pasó a ser privado.
Para los que anden medios perdidos en el tema, les cuento que estoy refiriéndome a LibreOffice 3.4.4 RC 1, la última versión del que vendría siendo el clon del que ha dado la vuelta al mundo OpenOffice. ¿Y por qué apostar por él, en lugar de por el más famoso programa anterior? Pues a continuación les contamos las razones.
Y es que resulta que precisamente LibreOffice nace básicamente tras la adquisición por parte de Oracle del programa que incluye todas las herramientas necesarias para la edición de texto, de gestión numérica y de presentaciones, al más puro estilo Microsoft Office pero de carácter libre, bajo la licencia LGPLv3 que permite que se modifique y redistribuya. Así, muchos desarrolladores decidieron alejarse del proyecto y fundaron una nueva idea, la cual se llama LibreOffice.
LibreOffice es el clon de OpenOffice en lo bueno y en lo malo. Y es que precisamente a sido montado en la misma base del programa anterior, por lo que no hay grandes cambios ni en cuanto a velocidad ni a interfaz de uso. Es más bien una cuestión de filosofía de apostar por el software libre de verdad. A ustedes la elección, aunque el precio no va a influir, porque les cuesta cero euros.
Enlace: Descarga LibreOffice
Unos pequeños matices:
LibreOffice nace tras la adquisición por parte de Oracle de la compañía Sun Microsystems, propietaria a su vez de OpenOffice (no compra directamente OpenOffice) y por las dudas que tal compra suscita sobre la continuidad del proyecto OpenOffice.
En cuanto al comentario «…al más puro estilo Microsoft Office…» no puede ser más desafortundo, por un lado se trata de una suite ofimática como cualquier otra, no sólo existe MS Office, sino también Corel WordPerfect Office o IBM Lotus Symphony entre otros. Además comparando las últimas versiones de ambas aplicaciones, nos daremos cuenta de que no comparten precisamente estilo (el interfaz de LibreOffice es más sobrio y clásico).
Por último la parte de «…pero sin licencias…» no puede ser más desafortunada, denotando su nulo conocimiento sobre las licencias de software y falta de rigor. LibreOffice se ofrece gratuitamente pero con licencia LGPLv3 que nos permite, por ejemplo, redistribuir así como modificar el programa.
Buenas Pepito:
En primer lugar gracias por la aportación y por tu tiempo. En segundo, quería aclarate que en cuanto a la mención a Microsoft Office, quería simplemente mencionar al servicio que es más conocido, aunque como dices la interfaz de libre Offce es mucho más sobria, en ningún momento se pretendía hacer pensar que fuesen similares más allá del concepto de la herramienta.
Por último, y en cuanto a la licencia, lo he corregido, aunque mi idea era hablar de cara un público más genérico que no está familiarizado con estos términos y en un lenguaje coloquial se usa "sin licencias" como sinónimo de software libre que puede ser modificado y redistribuido.
Saludos y gracias
Añado a lo mencionado por Pepito que el término «clon» tampoco es muy correcto. No es un clon, es un «fork», desde que Oracle adquirió Sun el código fue continuado por dos grupos distintos, OpenOffice y LibreOffice. Ninguno copia al otro, pero son muy parecidos al tener una enorme cantidad de código idéntico, aunque cada vez van distanciándose más.