Generalmente aquellos somos poseedores de un smartphone con Android como sistema operativo instalamos las aplicaciones que queramos desde Google Play aunque hay otras tiendas alternativas como las de la propia Amazon. Sin embargo, muchas veces necesitamos instalar una aplicación que no está o no lo queremos bajar directamente de Google Play. Muchos son los casos en los que puede darse esta situación, el más común de todos es que por ejemplo la página oficial de la aplicación nos ofrezca una versión de la misma más moderna de la que podemos encontrar en Google Play, un ejemplo claro de esto es Whatsapp y sus versiones Beta. Estas aplicaciones que encontraremos fuera de Google Play son ficheros APK.
Entonces, la primera pregunta que nos puede surgir es qué demonios es un APK. Un APK no es más que la manera de distribuir aplicaciones en Android. Aunque desde Google Play no lo veamos, lo que nos descargamos cuando instalamos una aplicación desde la tienda de Google no es más que un fichero APK. A parte de los detalles técnicos y resumiendo mucho, un APK no es más que un fichero que empaqueta el código de la aplicación y algunos archivos auxiliares como el manifiesto de permisos y otros.
Pero, una vez que me he descargado el fichero APK, que tengo que hacer con él. Pues lo primero que hay que saber es que por defecto solo podremos instalar aplicaciones de orígenes seguro, es decir, de Google Play. No obstante esta configuración por defecto puede ser cambiada y permitir que el usuario instale aplicaciones de orígenes desconocidos. Para ello solo hay que ir a los ajustes del smartphone y desactivar la opción correspondiente que se encuentra en la sección de seguridad.
Una vez hecho esto tenemos que llevar el fichero APK al smartphone. Para esto podemos hacerlo de muchas formas, descargar directamente el APK al smartphone usando su propio navegador, pasar el archivo APK por cable desde el PC donde lo hayamos descargado al smartphone o usar cualquier servicio de almacenamiento en la nube como Dropbox, Box o Drive, entre otros, para pasar el fichero.
Una vez que lo tenemos en el smartphone solo tenemos que, usando un explorador de archivo como ES File Explorer, seleccionar el APK y con esto iniciaremos el proceso de instalación que a partir de este momento es exactamente el mismo que se realiza desde Google Play informando por ello de los permisos solicitados por la aplicación entre otras cosas.
Una advertencia que sí os hacemos es que la instalación de aplicaciones (APK’s) de las que no conocemos su procedencia es un acto que puede poner en riesgo la seguridad de tu smartphone y, lo más importante, de tus datos contenidos en él. Por esto es por lo que no recomendamos la instalación de ninguna aplicación usando este método si no se está 100% seguro de su procedencia.