Microsoft ha sacado a la luz una nueva versión de su último sistema operativo, versión que responde al nombre de Microsoft Windows 10 S. Una versión que está orientada a ser ejecutada en dispositivos que hagan uso de procesadores ARM y x86.
Cuando vemos el movimiento realizado por Microsoft con el lanzamiento de Windows 10 S a todos se nos viene a la mente el sistema operativo Windows RT. La incursión de Microsoft en los sistemas operativos para procesadores ARM se podría considerar como un fracaso. Windows RT no llegó a consolidarse en un mercado en el que el gigante Android es el gran rey a destronar.
Uno de los principales problemas que presentó Windows RT fue sin duda el número de aplicaciones que podíamos encontrar en la tienda de aplicaciones del mismo. Dicha tienda no tenía apenas APPs disponibles y los equipos que usaban este sistema operativo solo disponían añadir funcionalidades extra por medio de aplicaciones que fueran descargadas de la tienda. Por lo que teníamos equipos que únicamente servían poco más que para navegar. En este sentido su gran competidor Google con el lanzamiento de los ChromeBooks lo supo hacer mucho mejor, ya que puso a la venta dispositivos con una tienda de aplicaciones amplia y que se vendían a precios realmente competitivos.
Se podría decir que Microsoft ha aprendido de sus errores. Quizás gracias a los mismos ha decidido cambiar en parte la filosofía detrás de Windows 10 S.
Con Windows 10 S los usuarios recibirán una versión «capada» de Windows 10. Pero una versión con una tienda de aplicaciones Windows Store, que ha mejorado bastante. Pese a todo y al igual que pasaba con Windows RT, Microsoft no va a permitir el uso de ficheros con extensión .exe. Esto es por un lado algo negativo, ya que limita un poco el sistema, pero por otro lado lo protege enormemente de sus principales vulnerabilidades, es decir, la presencia en el mismo de malware o virus.
¿Para quién está pensado Windows 10 S?
Seamos sinceros, Windows 10 S está pensado para el usuario medio. Si lo tuyo es la programación, la edición gráfica o el uso de distintos programas puede que este sistema operativo no sea la mejor opción.
La tienda de aplicaciones está creciendo, y ayudará y mucho a que este sistema se asiente entre los usuarios la incursión de grandes videojuegos. Ademas la conversión de una aplicación a este sistema operativo es bastante sencillo. Lo que permite que las principales empresas que desarrollan software puedan adaptar sus programas al mismo sin demasiadas complicaciones…lo que le ayudará a crecer. Nadie quiere usar un sistema operativo si no puede usar nada en él.
Todo lo que acabamos de comentaros unido a los pocos recursos que consume lo convierten en una alternativa atractiva para su uso en tablets u ordenadores del estilo de los Chromebook. Por ejemplo las nuevas Surface Laptop vienen de serie con este nuevo sistema, pudiendo ser actualizados a Windows 10 Profesional.
Tendremos que esperar aún un poco para verlo en acción, y ver que tal se comporta. En cuanto podamos daremos buena cuenta del mismo.